La verdad es que al mundo ha evolucionado o por lo menos cambiado mucho en los últimos años y aunque siempre suelen pasar este tipo de cosas debemos decir que en las últimas décadas la tecnología ha modificado sobremanera la forma en la que vivimos, de modo que todo esto ha tenido una fuerte repercusión en la manera de comunicarnos unos con otros. Los servicios postales trabajan cada vez menos en lo que tiene que ver con las tradicionales cartas que solemos enviar para hacer llegar un mensaje a otra persona y esto tiene que ver con que como todos sabemos hoy es mucho más fácil enviar un e-mail.

Pero sin embargo, en Andorra se sigue con la tradición de plasmar lo que uno quiere comunicar en un papel y aunque la tendencia es que siga bajando esta modalidad, se puede ver como tratan los andorranos a este servicio que en gran parte del mundo solo representa una actividad ligada con la nostalgia. Nos parce una buena iniciativa que se respeten este tipo de tradiciones porque pensamos que las cartas son un tanto más personales y le dan un entorno diferente al mensaje que deseamos comunicar.